Disponer de su propio depósito o estación de servicio de gasóleo es una alternativa económica para muchas empresas y supone una mayor flexibilidad a la hora de repostar sus propios vehículos. Los sistemas de tanques de gasóleo están totalmente equipados con una escalera y, si es necesario, una plataforma operativa y, en caso necesario, preparados para la instalación de una bomba de combustible. Al igual que en el sistema de depósitos de gasóleo para calefacción, se instalan los accesorios necesarios. Los depósitos son de doble pared, acero en crudo por dentro, recubierto por fuera, sobre una superficie granallada y pintados según los requisitos del cliente.